Hablando en términos de metodología del entrenamiento deportivo, existe una etapa final del proceso de entrenamiento llamada taper o puesta a punto, en la cual se emplea un microciclo precompetitivo que debe cubrir las siguientes demandas:
1. Emplea tareas y ejercicios específicos del deporte, que simulan la posterior actividad de competición.
2. Desarrolla las capacidades de velocidad máxima (potencia) y la rapidez específica del deporte.
3. Ofrece la recuperación completa tras las sesiones de entrenamiento de alta fatiga que se desarrollaron en el anterior mesociclo.
En pocas palabras se debe ensayar la competencia lo más parecido posible a lo que se va enfrentar el deportista, aplicando reglamentos, enfrentamientos con rivales similares, misma duración del esfuerzo (o mayor aun para generar resistencia especial competitiva), utilización de tecnologías aplicadas en la competencia (ejemplo del marcador electrónico como en el video), incluso la porra, etc
Referencia: Issurin, V. and Devi, P. (2015). Entrenamiento deportivo. Barcelona: Paidotribo.